El comediante, quien se ha hecho viral por un video en el que se ve vendiendo mochilas en la calle, ha respondido las críticas en su contra e insiste en que la plata no le alcanza para vivir bien.
Alvaro Lemmon, ‘El hombre caimán’, recordado en todo el país por su trabajo en ‘Sábados Felices’, volvió a generar polémica desde sus redes sociales ante las numerosas críticas que está recibiendo por estas horas, ya que muchas personas aseguran que el no tiene problemas económicos y que el video fue algo orquestado para generar lastima.
Recordemos que el humorista apareció en un video publicado hace varios días, donde aparece Lemmon y explica que actualmente se dedica a vender mochilas en las calles de Santa Marta porque dice estar mal económicamente, algo que desmintieron sus amigos y familiares.
Sin embargo, el pasado viernes se viralizó una entrevista en la que él mismo decía que su pensión era de 4 millones de pesos, lo cual ha causado que miles de usuarios se enojaran, pues asumieron que Álvaro Lemmon no estaba hablando con la verdad. Como respuesta a la polémica, el humorista dio la cara en sus redes personales y retó a las personas que no le creen que está pasando un mal momento financiero.
Incluso, la propia familia de Lemmon emitió un comunicado en el que se mostró molesta por la forma como actuó el comediante, al mismo tiempo que señaló que él tiene una buena pensión, tiene carro y ha recibido ayuda siempre que la ha necesitado. Un par de horas después, el ‘hombre caimán’ quiso dar su versión de los hechos, como respuesta a lo que dijeron sus seres queridos.
“Pago arriendo y servicios, y estudios de mi hijo menor que está estudiando en la universidad y apenas tiene 19 años. Quedo sin un peso, no trabajo en ninguna emisora o canal de televisión regional (…) Dicen que es indigno mostrar mi situación, pero pretenden que viva con $ 1.800.000 cuando tienen otras entradas, trabajan en emisoras como César Corredor y ‘Polilla’, que son los que más me han criticado y me mandan a vivir tranquilo con ese sueldo”, aseguró el Hombre Caimán.
