Netanyahu y Mikati protagonizan acercamiento que podría cambiar el rumbo del conflicto, pero las tensiones persisten.
Israel anunció un acuerdo de tregua con Hezbolá, marcando un posible punto de inflexión en un enfrentamiento que ha dejado miles de muertos. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó que el cese al fuego comenzará “esta noche”, pero aclaró que su duración dependerá de las acciones del grupo libanés.
Por su parte, el primer ministro de Líbano, Najib Mikati, instó a la comunidad internacional a garantizar la implementación inmediata del alto el fuego. Sin embargo, los términos del acuerdo incluyen compromisos controvertidos, como la retirada de las tropas israelíes y el repliegue de Hezbolá al norte del río Litani, además de futuras negociaciones sobre la frontera.
Un alto el fuego con condiciones
Netanyahu fue enfático al afirmar que Israel mantendrá “libertad de acción militar” si Hezbolá viola los términos. “Si intentan armarse, atacaremos. Si lanzan un cohete o cavan un túnel, atacaremos”, advirtió. Este punto ha generado rechazo en el gobierno libanés y en Hezbolá, aunque el respaldo de Estados Unidos ha sido clave para la negociación.
En la práctica, la tregua permitirá que los 60,000 israelíes desplazados en el norte del país puedan regresar a sus hogares, al tiempo que Israel se enfocará en la amenaza iraní y sus aliados regionales como Hamás.
Las cifras de un conflicto devastador
Desde octubre de 2023, casi 3,800 personas han muerto en Líbano, según el Ministerio de Salud libanés. En Israel, el conflicto ha cobrado la vida de 82 militares y 47 civiles en 13 meses. Netanyahu aseguró que los objetivos estratégicos se han cumplido, incluyendo el debilitamiento de Hezbolá, cuyo líder, Hasán Nasralá, fue asesinado junto a la cúpula del grupo.
Críticas internas y un futuro incierto
Aunque el acuerdo ha sido calificado de histórico, no está exento de críticas. Algunos sectores de extrema derecha en Israel y alcaldes de comunidades fronterizas cuestionan la falta de garantías de seguridad para los desplazados. Netanyahu prometió que las tropas regresarán a Líbano si es necesario.
En paralelo, los bombardeos sobre Beirut continúan, evidenciando que la tregua no es un fin definitivo, sino un respiro en una región marcada por la violencia y las tensiones históricas.
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