El escándalo de las ‘chuzadas’ denunciado recientemente por la Revista Semana, en las que se confirma cómo miembros del Ejército Nacional habrían estado interceptando las comunicaciones de periodistas, políticos e incluso otros miembros de la institución, ha tomado una nueva dirección, luego de que uno de los afectados insinuó la posibilidad de que los operativos ilegales estarían direccionados contra el presidente de la república, Iván Duque.
Así lo hizo ver el exsecretario general del actual gobierno y hoy embajador en el vaticano, Jorge Mario Eastman, quien fue uno de los funcionarios interceptados por las Fuerzas Armadas, y cuya presencia en la lista de los 130 afectados levanta muchas suspicacias teniendo en cuenta sus lineamientos políticos contrarios a los demás afectados.
Por tal razón, Eastman fue uno de los primeros interceptados que dio declaraciones a los medios respecto al grave escándalo que sacude hoy el país. El hoy embajador habló sobre su situación durante la emisión del mediodía de Noticias Caracol, donde comentó que una de las razones por la cual pudo haber sido interceptado radica en su cercanía con el mandatario, pues, en sus palabras, describió que los militares buscaban “información privilegiada del propio corazón de la Presidencia de la República”.
Dicha posibilidad hizo que Eastman hiciera hincapié en que las investigaciones a los uniformados se realicen con toda la celeridad del caso, puesto que desde su óptica lo más probable es que él no haya sido el blanco principal de quienes se dedicaron a realizar las interceptaciones sino que el objetivo sería encontrar información proveniente de la Presidencia.
“La investigación debería encauzarse hacia quién podría tener interés en obtener una información ilegal a través del secretario general de lo que estaba pasando en la Presidencia”, comentó el exsecretario.
Respecto al rumor sobre la supuesta relación del actual embajador en el Vaticano con la Revista Semana, Eastman descartó la posibilidad tajantemente, afirmando que mientras cumplia las funciones de Secretario del Gobierno, solo se dedicó a su labor y no colaboró ni con Semana ni con algún medio de comunicación como fuente de información y se mostró extrañado de haber sido interceptado.
“Yo no era fuente de ningún medio de comunicación. Con Semana tuvimos un diálogo en febrero o marzo del año pasado sobre asuntos del Ejército Nacional, pero no tenía nada que ver con esta información (…) Nunca sospeché nada, me parece imposible que eso pase con una persona que, como en mi caso, fui 2 veces viceministro de Defensa y tengo cercanía con muchos de los mandos militares, por eso me sorprendió mucho que esto ocurriera”, concluyó Eastman.