La alcaldesa no ocultó su molestia con los planes que tiene el Ministerio de Vivienda con respecto a las casas de interés social y cómo se verá afectada la población.
Actualmente se están llevando a cabo las votaciones y los debates referentes al Plan de Ordenamiento Territorial(POT) en el Concejo de Bogotá, liderados por el ministro de Vivienda, Jonathan Malagón, quien viene trabajando todo el 2021 en múltiples proyectos para que la gente pueda conseguir casa propia con ayuda del Estado.
Sin embargo, el jefe de esa cartera tiene entre su agenda varios proyectos que no están avanzando de la mejor manera, por lo que en las últimas horas ha realizado varios reparos en contra de la alcaldesa, Claudia López, a quien se le atribuye ser la principal propulsora de ese plan y una de sus más férreas defensoras actualmente del POT.
Uno de los puntos críticos del proyecto, que generó varias críticas por parte de Malagón, es que establece que actualmente el área mínima de las viviendas en Bogotá deberá ser de 42 metros cuadrados; dicha medición se opone a muchos proyectos que se adelantan en la capital y que ofrecen apartamentos mal llamados ‘cajitas de fósforos’, cuyos precios suelen ser muy altos y que están diseñados para que, a duras penas, quepa la cama, junto a la cocina y el baño.
Por medio de una carta enviada a la alcaldesa López, el ministro Malagón justifica la presencia de unidades de vivienda de menor área, afirmando: “responde a las dinámicas demográficas que está experimentando nuestro país (…) Según cifras del DANE, en Bogotá el número de personas por hogar pasó de 3,6 en 2005 a 2,8 en 2020, tendencia que se prevé que se mantenga, llegando a 2 integrantes en promedio para mediados de siglo”.
Ante lo comentado en la carta, la alcaldesa de la capital respondió a los planteamientos de Malagón, y comenzó por recordar que el POT es de autonomía municipal y cada territorio lo ajusta de acuerdo a sus necesidades por lo que no está faltando a algún tipo de orden estatal.
Pero López no se quedó ahí, ya que no ocultó su molestia por las críticas, por lo que le preguntó al ministro Malagón “¿En cuántos metros cuadrados vive el señor ministro de Vivienda? (…) ¿Una familia de cuatro personas que se gana dos salarios mínimos no tiene derecho a una vivienda digna y segura?”.
