La actual crisis ha servido como motor a la creatividad de dos diseñadores colombianos, quienes esperan aplicar un novedoso proyecto de pedagogía para la comunidad campesina respecto al virus.
Gracias al trabajo de un grupo de jóvenes emprendedores, el país está listo para aplicar una nueva estrategia de pedagogía con los cuidados respecto a las precauciones que se deben tomar al Covid-19, direccionada a toda la población campesina, indígena y demás comunidades que no cuentan con acceso a la información de la misma forma que las personas en las ciudades.
Todo nace de la idea de Catalina Lotero y Felipe Guarín, dos diseñadores que decidieron hace 2 años mudarse a Tokio a realizar una maestría en Diseño e Innovación, y que tras tener que lidiar con la pandemia en Japón, país que no hizo cuarentena, decidieron aplicar los conocimientos obtenidos de esa experiencia para poder aplicarlos en Colombia, donde el virus continúa avanzando.
“En enero cuando empezó el virus a esparcirse por fuera de China y no se sabía mucho sobre el virus nos entró un sentimiento de miedo y ansiedad, como a la mayoría del mundo, hasta el punto de afectarnos físicamente (…)Ahí decidimos que debíamos hacer algo para diseñar soluciones a los problemas que rápidamente estaban emergiendo”, afirmó Botero en entrevista para la revista Forbes.
Fue así como decidieron aplicar en el MIT Challenge del Covid-19 con la idea de crear conciencia sobre el uso correcto del tapabocas que podría crear una gran diferencia en la prevención del virus. Teniendo esa idea clara, los diseñadores crearon una estrategia pedagógica a través de etiquetas en productos de alto consumo, tales como el arroz, la leche, el café y demás artículos, los cuales llevarían consigo etiquetas en las que se explique de manera sencilla estrategias de prevención y así llegar a comunidades en donde el acceso a la información es escasa.
“Nos enseñaron que uno nunca debe tocar la parte de enfrente del tapabocas, información como esta fue la que nos pareció importante comunicar. Nos dimos cuenta de que muchas de las campañas que tiene como objetivo educar sobre las buenas prácticas para prevenir el contagio existían en el mundo digital, pero en países en vía, como Colombia, más del 50 % de la población no tiene conexión”, explicó la pareja de diseñadores.
El impacto de su trabajo fue tan positivo y generó tan buenos comentarios que los hizo merecedores del premio MIT Challenge realizado en Japón, donde luego de pasar el proceso de selección entre las más de 4.500 personas que aplicaron a la iniciativa, fueron escogidos debido a la creatividad y enfoque que tuvieron en su proyecto que busca que el cuidado durante la pandemia no se quede solo en las zonas urbanas.