Las investigaciones contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez, el cual se lleva desde el año pasado por supuesta manipulación de testigos, siguen deetenidas, hecho que viene siendo controvertido por la opinión pública desde hace meses, teniendo en cuenta que procesos como los de su exabogado Diego Cadena e investigaciones como la ‘Ñeñepolitica’ no han sido adelantados con la premura que requieren.
Una de las personas que ha venido denunciando esta dilatación en el proceso es el senador Iván Cepeda, quien anunció hace un par de horas que interpondrá una denuncia penal y una queja disciplinaria contra Cristina Lombana, actual magistrada de la Corte Suprema de Justicia, y que al parecer estaría interfiriendo en que la investigación pueda reanudarse en su agenda.
Entre los argumentos comentados por Cepeda para tomar acciones contra la magistrada, se advierte que Lombana habría realizado una serie de actividades que lograron interferir ilegalmente el curso normal de la investigación contra el exmandatario, afirmando además que la togada tendría algún tipo de animadversión en su contra desde que arrancó el proceso entre ambos congresistas.
“Con peticiones y actitudes ilegales confirma su animadversión en mi contra y su empeño de influir indebidamente en dichas investigaciones, o torpedearlas como lo ha venido haciendo recientemente con una solicitud en otro expediente del que hago parte”, comentó Cepeda en su querella.
Igualmente, el parlamentario anunció que prepara una solicitud que será enviada a la Sala Especial de Instrucción de la Corte Suprema, con la idea que Lombana sea apartada de la investigación y de cualquier clase de información sobre investigaciones en las que él figure como víctima, querellado o denunciado, debido a las diferencias que esta ha mostrado en su contra.
Recordemos que la magistrada Lombana llegó a sonar en su momento luego que el periodista y columnista Daniel Coronell la nombrara en una de sus publicaciones como ‘La calladita’, debido a su silencio ante la Corte respecto a su trabajo previo en la oficina de uno de los abogados del expresidente Uribe, hecho que resta objetividad en las decisiones de la togada.