La mandataria habló de la situación en la que se encuentra Bogotá y los riesgos que representa la nueva cepa del virus, la cual ya estaría rondando en la capital.
Tras retornar a Bogotá luego de sus vacaciones en Costa Rica, la alcaldesa Claudia López ha tomado una serie de acciones para controlar la propagación del virus y evitar que el sistema de Salud colapse, arrancando por decretar la alerta roja en la ciudad y todo el sistema hospitalario, el cual se encuentra de un cupo de UCI de casi un 100%, según los reportes de las entidades médicas.
Sin embargo, los peligros en los que se encuentra Bogotá no son iguales a los del año pasado, pues sumado al virus que ya lleva meses rondando en la capital, está la aparición de una nueva cepa proveniente del Reino Unido, desde donde los reportes advierten que esta es mucho más contagiosa que la anterior.
La alcaldesa aseguró que la ciudad está atravesando por un segundo pico de contagio, que representa un crecimiento de nuevos casos de hasta un 32%, con una propagación del virus superior a la del primer pico que alcanzó a llegar al 27%, algo que para la alcaldesa “no era normal” y que, según la opinión de los expertos, se debe a la presencia de la nueva cepa y su alta capacidad de contagio.
“Esto se está viendo reflejado en la demanda de camas de casos intensivos. Se disparó la demanda de camas covid-19 (…) La carga de diciembre ya debería estar bajando. Pero no; hay un factor adicional: la nueva variante de covid-19 debe estar ya circulando en Bogotá”, comentó la alcaldesa, quien además afirmó que la variante del virus se habría reportado en la localidad de Usaquén.