Nuevamente se autorizó la realización de procedimientos quirúrgicos de baja complejidad o ambulatorios.
La Secretaría de Salud de la capital dio a conocer que, tras disminuirse los contagios de Covid-19 desde el pasado 18 de enero, todos los indicativos de emergencia también comenzaron a mejorar; por ende, la ocupación general de unidades de cuidado intensivo, que era superior al 90%, logró ubicarse en el 76,4 %, y así salir de la alerta roja hospitalaria.
“¡Gracias Bogotá! ¡Cada aporte individual y colectivo de cuidado ha valido la pena! La ocupación UCI bajó al 74% con lo cual podemos levantar la alerta roja hospitalaria y volver a programar algunos procedimientos y cirugías que estaban suspendidas. ¡Sigámonos cuidando mucho!”, publicó la alcaldesa Claudia López en su cuenta de Twitter.
Así las cosas, mientras Bogotá esté en alerta naranja, no continuarán las cuarentenas estrictas en localidades o UPZ, pero sí seguirá funcionando la norma del pico y cédula para tramites bancarios, comerciales y demás.
“La alerta naranja no significa que no estamos en alerta. Es una situación que sigue requiriendo cuidado, pero ya nos permite reprogramar procedimientos quirúrgicos y exámenes diagnósticos que requieren anestesia general. (…) Esta es una noticia fundamental para miles de personas que están a la espera de un procedimiento que, sin ser urgente, es necesario, pero también para el sistema hospitalario.”, agregó el secretario de Salud del Distrito, Alejandro Gómez.
Entre tanto, pese a salir de la alerta roja, las clínicas y hospitales deberán seguir realizando el reporte diario de ocupación de UCI, pues no se descarta un nuevo pico debido a que no ha empezado el plan de vacunación.