Conseguir apartamento en Bogotá se ha vuelto un desafío para muchas personas que, entre el alto precio y lo poco que se ofrece, siguen expectantes de una solución para vivir dignamente.
La venta y compra de apartamentos ha ido incrementando de manera considerable durante el primer semestre del 2021, en comparación con el movimiento del mercado en ese mismo periodo del año en el 2020, periodo marcado fuertemente por la pandemia. Sin embargo, el tipo de vivienda que se está moviendo en el mercado en Bogotá son muchas y muy variadas, aunque no necesariamente cómodas tanto en precio como en espacio.
Entre las ofertas existen casas tanto usadas como nuevas, las cuales están siendo analizadas por miles de personas que están buscando constantemente un lugar en el cual invertir y que la opción de adquirir un apartamento siempre está en la mente de más de uno, especialmente si son viviendas que están en zonas centrales o con buen acceso a las vías principales y sectores concurridos.
Así lo demuestra un estudio realizado por el instituto Fincaraíz, y citado por la revista Portafolio, la cual reveló que en la capital del país incrementó la búsqueda de apartamento en un 16 %, mientras que los apartaestudios lo hicieron en un 13 % y las casas solo lo hicieron en un 4 %.
Actualmente, son muchas constructoras que se han decantado por crear proyectos de vivienda con más apartamentos y apartaestudios en zonas específicas de la ciudad pensando en su ubicación, razón por la que la construcción de casas se ha dejado para los extremos de la ciudad o los municipios aledaños al norte, occidente y sur.
En tanta y tan variada la oferta que existe entre la gente para comprar casa nueva o usada en Bogotá en todas sus localidades, hay un tipo viviendas a las que popularmente se le ha denominado como ‘cajitas de fósforos‘, pues son tan pequeñas que muchos se preguntan cómo hacen para vivir en estos lugares.
Actualmente, son varios sectores de la capital en los que se ofrecen viviendas que oscilan los 18 metros cuadrados, espacio en el que a duras penas cabe la cama, una mesa y algo de decoración, pues estos ya vienen adecuados con una cocina y un baño, dejando casi nula la posibilidad de poder guardar muchas cosas en ellas.
En el barrio Chicó Norte hay proyectos de vivienda que van desde los 15 a los 17 metros cuadrados (m2) que pueden llegar a costar 155 millones de pesos, un precio por el que en otro sector de Bogotá se pueden conseguir apartamentos el triple de grandes. Sumado a esto, se establece una administración que puede valer hasta 500.000 pesos.